Reseña: "León Kamikaze"

Título: León Kamikaze

Autor: Álvaro García Hernández

Editorial: SM

Género: Contemporánea

Año de publicación: 2016

Nº de páginas: 232

Formato: Tapa blanda (con solapas)

ISBN: 9788467585926

Sinopsis: Me llamo León, León Kamikaze. Nunca tuve una familia; ni siquiera unos amigos. Me enamoré una vez... He tenido tres vidas. En la primera, el mundo me rechazó. En la segunda, todos me odiaron. En la tercera, aún no sé quién soy. Me llamo León, León Kamikaze, y este es el rastro que me ha traído hasta AQUÍ.

"Al pensar, hablamos con nosotros mismos. La materia de los pensamientos es el lenguaje, las palabras. Nuestro cerebro está repleto de palabras, pero apenas reflexionamos sobre ellas, apenas usamos las palabras para pensar sobre las palabras. No entendemos que, al hablar, y sobre todo al pensar, comunicamos tantas cosas de nosotros mismos que necesitamos soñar para entender y asimilar lo que nuestro cerebro nos dice. Porque estamos sordos y no queremos quedarnos solos ante lo desconocido"

(León, 83)

Introducción: 

Sobre esta novela había oído hablar por Booktube, además de por ser el Premio Gran Angular 2016. En parte me apetecía leerla y en parte no porque no estaba muy bien valorada por personas con gustos parecidos a los míos. La portada es una pasada, con tantos detalles y con tanto significado para/con la historia. En cuanto al autor, era la primera que leía.

"Te necesito, te necesito tanto que a veces me duele. No es que me olvide de ti, es que a veces necesito estar solo. Me he pasado la vida solo y me cuesta, incluso me gusta"

/León, 156)

Trama:

Sí. Es una novela donde pasan muchas cosas, tiene mucha acción. Aunque hay momentos que te pierdes. También podemos encontrar grandes dosis de sorpresas, porque abundan bastante.

En cuanto al ritmo de lectura, he de decir que va a rachas. Hay momentos que avanzas muy rápido y otras muchas veces donde, hagas lo que hagas, solo puedes leer dos o tres páginas porque se hace algo tediosa.

Me ha gustado las temáticas tratadas. Hace una gran reflexión sobre los grandes de la filosofía, indaga sobre el rechazo, la madurez, la libertad. Y también del amor. Tanto el amor de madre a hijo como relaciones amorosas, estas segundas no tan agradables a mi parecer. No me gustan ese tipo de relaciones ni dependencias.

Esta novela, en parte, es necesaria porque aporta una nueva idea de novela, intentando ser más dinámica, con un personaje completamente distinto a los anteriores. El lenguaje es prácticamente comprensible, con descripciones casi inexistentes y con diálogos que muchas veces no sabes de quién son. Y eso es de las cosas que más me han gustado.

"Mi vida no ha sido fácil, pero creo que hay dos tipos de personas: las que viven y las que solo existen. Yo no quiero existir. creo que la vida debe ser una actitud, que vivir no es dejar que pase el tiempo, sin esforzarse por merecerlo y utilizarlo con pasión. Creo que hay que estar loco por vivir, que hay que emocionarse con todo lo que uno hace, porque si no, el cerebro deja de funcionar y se convierte en algo que solo existe"

(León, 217)

Personajes:

Los personajes son originales, están bien construidos (tanto los principales como los secundarios). Además, me gustan que tengan vida tanto antes como después del período que se nos cuenta en la novela, es decir, que sean prácticamente reales.

Si tuviese que destacar alguno sería al tío de León, por la gran transformación que sufre a lo largo de toda la historia. Es uno de los personajes mejores creados que, sin duda, tiene una gran importancia en la historia.

"Quiero que sepas que todos llevamos un demonio dentro que nos puede convertir en monstruos si no nos enfrentamos a él. Y tú, León, como todo ser, debes de luchas contra ese demonio, contra todos tus demonios"

(Tío de León, 125)

Opinión personal:

Aunque no me haya convencido en todos sus aspectos, tiene otros por los que sí merece leer esta historia. Tiene algo importante que contarnos, no dejes escapar la oportunidad que se te presenta delante de tus narices.

Valoración:

"La mala suerte no avisa, somos nosotros quienes nos sorprendemos al encontrarla, ella no, ella lleva toda la vida esperándonos"

(Lola, 39)